Ese gran antropólogo que es
Humberto Miceli alguna vez dijo, en una de sus magistrales conferencias sobre
contaminación acústica, que “el ruido es un proceso de dominación, cuando subo
el volumen, estoy negando al otro en su condición humana, lo invado y le
impongo mis gustos”. Así piensa, vive y actúa el agresor acústico, no es un individuo
al que simplemente le gusta escuchar música a alto volumen es alguien que
quiere obligar a los demás a escuchar lo que el quiere, cuando quiere y como
quiere. Es un ser totalmente egocéntrico que no reconoce al otro como persona y
por lo tanto, tampoco lo respeta. Al contrario, goza cuando lo somete y violenta
sus derechos porque eso lo hace sentir poderoso. Es tan malvado que disfruta
haciendo sufrir a sus semejantes. Su filosofía de vida lo conduce primero a la
soberbia, que lo lleva a reclamar derechos absolutos para sí y luego a la
anarquía, ya que al ignorar al otro también hace lo mismo con las leyes.
¿Cómo es posible que una persona pueda llegar a tal extremo?
Probablemente las respuestas sean
múltiples. Muchos dicen que no podemos dar lo que jamás hemos recibido. Si
seguimos ese camino, podríamos afirmar que la falta de educación y afecto en
los primeros años de vida pueden formar una persona insensible, resentida y
despiadada que busque destruir al otro para vengar sus propias frustraciones.
El resentimiento es difícil de explicar pero casi siempre cuenta con un aliado
que es la envidia. Cuando el violento detecta que hay alguien que tiene lo que
el no tuvo o tiene valores que el no posee, comienza a provocarlo y agredirlo
de todas las formas posibles. El desarrollo de la tecnología le ha
proporcionado hoy un arma inmejorable para llevar a cabo su venganza; los
potentes equipos de sonido y en especial la baja frecuencia.
Ahora bien, cabe preguntarse ¿No se perturba también él que está a pocos
metros de distancia del equipo, escuchando música a un volumen tan alto que
afecte a los demás?
La respuesta es no, él ya está
perturbado y necesita ese volumen para enajenarse y evadirse de su propia
realidad porque no se soporta a sí mismo. Lo que no tolera el agresor acústico
es el silencio porque no tiene paz interior.
¿Qué hacer?
En el fondo el agresor acústico
es alguien que necesita y busca desesperadamente que alguien le ponga límites,
y es el estado el que tiene la responsabilidad legal de hacerlo antes que lo
haga el damnificado directo, porque si no las consecuencias pueden ser
terribles y el límite puede ser su propia vida.
Los vecinos de buen vivir,
también deben hacer su parte y cuando detectan una persona con esta actitud,
deben juntarse y ser solidarios con el o los perjudicados y denunciarlo de
manera conjunta a los medios de comunicación, autoridades municipales,
policiales, Defensoría de los vecinos, del Pueblo y de ser necesario, iniciar
acciones legales para hacerlo cesar definitivamente. El artículo 1071 bis del
Código civil respalda este reclamo.
Si las autoridades competentes no
actúan, hay que denunciarlas penalmente en las Fiscalías de Instrucción por
incumplimiento de los deberes de funcionario público.
No estoy de acuerdo en generalizar. Si estoy en mi casa y pongo músca (rock, cumbia, tango, clásica...) a un volumen muy elevado, invadiendo a mis vecinos, en este caso sí estoy haciendo mal y puede que este análisis psicológico esté en lo correcto. Sin embargo, si voy a un recital, normalmente la música tendrá un volumen elevado, pero no me convierto en un enajenado perturbado que necesita que me pongan límites. Yo podría decir que el que generaliza y pone todo en una misma bolsa, es aquel que sobrevalora su propia opinión y que desprecia lo que los demás piensan. Walter.
ResponderEliminarA lo que apunta este analisis es cuando lo hacen sin pensar en los demas.... si estas en un recital es obvio que va a estar el volumen alta y estas alrededor de un grupo o multitud de personas que lo están aceptando.... es diferente si vivís en un edificio y pones la música a un volumen elevado sin siquiera pensar en aquel que vive con vos que quizás no quiere escuchar eso esta obligando a hacer algo a alguien que no quiere. se puede escuchar sin molestar a nadie en un volumen considerado. los recitales son temas aparte por que si hay una multitud y hay un sonido bajo no van a lograr escuchar todos. solo se trata del que hace algo sin pensar en el otro.
Eliminar¿Cuándo se hace un recital es en un lugar cerrado y con la debida acustización para evitar que el sonido salga y moleste a terceros? ¿Si se hace al aire libre se toma la precausión de consultar a todos los vecinos para saber si aceptan ese tipo de música?
EliminarClaro por he Estás inavadiendo, él espacio de otro, la música es para que la escuche uno, no la demás gente por que no a todos les gusta la misma música que a tí.
EliminarEs muy diferente la música de una fiesta, al ataque nocturno de un vecino borracho a las 1 de la mañana. También están los idiotas que en sus coches aún a altas horas de la noche transitan en barrios habitados con la música a todo volumen. El único que generalizó inconscientemente eres tú
EliminarLos coches y motos molestan incluso sin música. Vivo al lado de una carretera y es horrible las vibraciones que emiten. Decibelios muy altos (60) aún sin música. Cuando pitan peor aún. Vivo al lado de una rotonda y los pitidos son muchos...
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ResponderEliminarDos cosas: en primer lugar te recomiendo leer el fallo de la Cámara de Apelaciones de la provincia de Chubut en el que dictaminó que los ruidos molestos son una lesión a la vida que debe sancionarse aunque exista autorización municipal para realizarlos. Segundo, por si no te diste cuenta, este es un sitio dedicado a las víctimas de las agresiones acústicas, no a los victimarios.
ResponderEliminarIr a un recital es una elección personal. Pero padecer el volúmen de quien lo ejerce constantemente, y no es la elección de una familia escucharlos, es muy distinto. Trae aparejados muchos conflicotos, la angustia es anunciada, el mal humor, es un trauma a gotas, nosotros todos los fines de semana padecemos los recitales de la IGLESIA DEL PUENTE AUDITORIO AVENIDA LA PLATA . Hasta pensamos en vender y mudarnos, con todo el sacrificio que nos costó hacer nuestro hogar.
ResponderEliminarTener un perro ladrando desde las 8 de la maniana a las 11 de la noche frente a tu vivienda/negocio desde un balcón, eso se llama violencia, llamar a la policia y estos te derivan a zoonosis donde llamas a todos los numeros arriba indicados y no hay respuesta tambien es violencia.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo! Estoy a favor de los derechos de los animales, pero quien cuida nuestros derechos? X lo menos a las 23hs termina de ladrar. .. en mi caso, sigue de noche también! Los dueños son unos desubicados
EliminarCoincido 100% con el artículo, siempre me pregunté por que son los mismos los que estan todo el dia con la musica o por que nescesitan poner la musica a esa volumen y con eso graves que solo le gustan a ello.Llegue a la misma conclusion.Casi siempre es gente que nescesitan que la escuchen o tuvieron algun trauma o ansias de fama;llegue a creer que solo la gente de menos recursos presisaba eso, pero despues me di cuenta que tambien menores y jovenes de clase mas acaudalada,sin limites,tambien presisaban de eso.Este blog es fabuloso.
ResponderEliminarmuy bueno el blog...hay personas que no distinguen lo que es concurrir a un recital que estar obligado a soportar el recital privado del vecino......no distinguen lo privado de lo publico...tal vez tengan otras intenciones ilegales en su vida cotidiana...soy enrique méndez ..no anónimo..vivo en gral rodriguez...zona semi rural y el vecino que genera las molestias da el perdil psicopatológico
ResponderEliminaranónimo....cuál es el valor de ser anónimo? enrique méndez brauer...vecino víctima de sonidos graves en zona semirural en gral rodriguez..pcia de bs as.
ResponderEliminarLeer esto fue una catarsis, siempre pensé lo mismo, que tienen su vida y su cabeza vacía, no me interesan sus problemas, ya son adultos y deberían poder resolverlos solos y no tienen porqué faltar el respeto a los demás, y los que lo hacen merecen sufrir las consecuencias
ResponderEliminarMuy bueno. Muchas gracias.
ResponderEliminarCoincido totalmente.
ResponderEliminarGracias por este espacio.
ResponderEliminarSiempre pensé que yo era la equivocada porque me quejaba de los ruidos de mis vecinos, compañeros de trabajo y de la gente en el transporte público, pero me doy cuenta que no soy la única que se ve afectada por este fenómeno. Siempre que me he quejado, me han agredido verbal y físicamente. En Colombia existe la cultura de que "entre más ruido hagas más feliz eres" y si no compartes esa idea seras ultrajado de todas las formas posibles.
ResponderEliminarSiempre he pensado que los que hacen ruidos son personas malas, ojo, los que salen con un parlante mas grande que ellos a la calle y le dan a todo volumen sin motivo alguno. Pero al leer esto lo que me dan ahora es lastima, lo que debemos hacer es pensar en lo afortunados que somos por haber y tener una vida feliz y tranquila, de haber tenido una buena educación, de tener un futuro y dar lo mejor a nuestros hijos y ellos también dar lo mejor a la sociedad. Solo así seremos libres de este del flagelo de estas personas y sus demonios internos.
ResponderEliminarMi vecino se sale a cantar a grito abierto, con su cerveza en mano, sus corridos acerca de gente con m3trall3tas, drog4s y camionetas.
ResponderEliminarEstamos en México y tristemente los delincuentes son admirados e inmortalizados en esa música horrenda
Soy una persona que escucha la música y ve documentales de NatGeo, Discovery Max, History2, Animal Planet, Discovery Science, en todo momento con audífonos inalambricos de los cuales tengo de 3 tipos y tamaños, por lo cual nunca molesto a mis vecinos, pues me gusta el silencio y la tranquilidad, sin embargo ellos no respetan eso, ponen sus bocinas grandes a todo volumen y es adrede y de manera intencional, vivo en un tercer piso y la muchacha del 2do piso tenía su ruido a todo volumen y me refiero al máximo, en el primer piso vive una vecina de la 3ra edad que tiene gatos y yo bajé a regalarle croquetas para gato y
ResponderEliminarlo hice a propósito con la laptop abierta y un programa de History chanel y mis audífonos puestos equilibrando la sobre mi brazo para que se notará como estaba inmerso en el documental y la vecina ruidosa del 2do piso abrió los ojos como plato cuando baje y pase a un lado e incluso me siguió al tercer piso donde ya no le corresponde y se me quedó viendo cómo no me afectaba su idiota serenata, al medio minuto de entrar a mi departamento note como apagó su bocina y asunto arreglado. Parece ser que le quite su poder de molestar y fue gracias a este blog que me hizo comprender la psicóloga del agresor acústico.
Felicidades por esta página.