"No tenemos lucha contra carne y sangre, si no contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. " Efesios 6:12

sábado, 16 de abril de 2016

LOS EFECTOS DE LAS BAJAS FRECUENCIAS

Fiesta con música electrónica produjo alto 
consumo de alcohol, drogas y cinco muertos

La música a alto volumen, en especial la que posee un alto contenido de baja frecuencia, http://unidosporsilencio.blogspot.com.ar/p/baja-frecuencia.html produce alteraciones psicológicas, aceleración del pulso y la frecuencia cardíaca, irritabilidad, resonancias en tórax y abdomen y dispara la secreción de adrenalina, dopaminas y otro tipo de hormonas que producen la pérdida del autocontrol y el dominio propio.
Una vez que una persona pierde el control de sí misma por causa de este tipo de sonido, se entrega y está a merced de quien lo emite para consumir lo que este le proponga; alcohol, estupefacientes o cualquier otro tipo de sustancias.
Eso es lo que sucedió en la famosa Time Warp que se realizó en el complejo Costa Salguero de la ciudad de Buenos Aires y “llamativamente” no fue explicado por ningún periodista, psicólogo o psiquiatra en ningún medio nacional.
El resultado final fue la muerte de cinco jóvenes y la internación de otros tantos.
¿Cómo y por qué sucedió?
Porque el estado, en este caso el de la ciudad de Buenos Aires, no solo lo permitió sino que fomenta este tipo de espectáculos en clara connivencia con los empresarios de la “noche” o de la “muerte” como los llaman algunos.
¿Por qué decimos que hay connivencia?
Porque si no la hubiera, el gobierno de la ciudad de Buenos Aires no hubiera presentado un recurso de amparo para que este tipo de “fiestas” o de “música” pudieran seguirse realizando a pesar de la prohibición judicial que impuso en primera instancia el juez Sebastián Casanello ante el pedido del fiscal Federico Delgado.
¿Cuál es el origen de esa connivencia?
El dinero, no solamente el de las entradas sino el de la consumición, entendiendo por tal alcohol, drogas y ahora se sumó el negocio de las agua y las bebidas energizantes, que por los trascendidos maneja el abogado “penalista” Víctor Stinfale. Por eso se cortó el agua corriente en los baños y se vendió cada botella de agua a más de cien pesos, había vendedores de droga que tuvieron mucho éxito, las cervecerías y el resto de las empresas que se dedican al expendio de alcohol obtuvieron monumentales ganancias, “fallaron” los controles de Prefectura, de “seguridad” privada y los del gobierno de la ciudad de Buenos Aires.
¿Es esto casualidad?
No, no lo es. Siempre que hay mucho dinero en juego, al menos en Argentina, los controles estatales “fallan”, dicen que está todo bien cuando no lo está.
¿Por qué?
Por qué el estado es socio de los organizadores y algunos funcionarios, probablemente, también.
¿Tiene algo que ver la tendencia ideológica o el partido político que representan esos funcionarios?
No, el dinero les gusta a todos. No es de derecha ni de izquierda.
¿Sucede lo mismo con otro tipo de música?
Generalmente no, únicamente con aquellos géneros en los que predomina la baja frecuencia como el rock, la cumbia y la música electrónica, que son las que “casualmente” promocionan los medios de comunicación. Esa es la razón por la que en los boliches,.discotecas, recitales de rock y cumbia, se consume una gran cantidad de drogas, hay disturbios, peleas, enfrentamientos y muerte, que en otros géneros como la música clásica, melódica o folklore, no existen.

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